Necesito cambiar.
Hoy me he dado cuenta de que no hago nada bien.
Paso de las clases, de mis amigos... Y como mal.
Pero lo de la comida es otra cosa. Quiero seguir comiendo así. Por lo menos hasta que pierda esos siete kilos, después ya veremos.
Volví al pueblo el pasado fin de semana. El viernes fue mi cumpleaños, así que podéis imaginar la cantidad de dulces y comida que preparó mi familia. Fue horrible. Me sentía fatal. Pero pude regresar el domingo a la ciudad y comer otra vez como yo quiero.
Si pierdo peso tengo la escusa de que dentro de tres semanas tengo el campeonato de Andalucía y con los entrenamientos he perdido peso.
Pero ahora tendré que comer algo si no quiero desmayarme en cada sesión de entrenamiento.
Tengo que cambiar.
Siempre ando mintiendo... Para protegerme, para sacar cosas en beneficio... Y ahora quiero ser completamente sincera con todo el mundo, ser clara. Lo necesito.
Creo que mi vida entonces será más fácil.
Tengo que ordenar las cosas que hay en mi mente.
Hacer que lo verdaderamente importante sea lo que esté arriba.
Tener una escalera de metas a conseguir.
Seguir corriendo y mejorar mi marca. Aprobar todas las asignaturas este semestre. Perder peso. Tener amigos de verdad, y no volver a caer en la misma trampas de siempre.
Necesito terminar. Necesito volver al mar. A mi mar.

Me siento muy afortunada de tener esos atardeceres durante unos meses al año. Creo que de ahí viene mi obsesión con el mar y con el agua. Con la tranquilidad que refleja... El agua es algo perfecto. 

Tengo que escribir una carta de disculpas ahora..

Me pesaré cuando llegue a  casa mañana. Buen fin de semana a todos.

Matilda.